Se llega a una edad en la que lo único que cuenta es poder ser tú mismo con todas sus consecuencias. Cuando eres más jóven puedes perder el tiempo, puedes intentar explicar las cosas, puedes procurar agradar, puedes tratar de no ser tú en algún momento conveniente, pero llega un punto en el que no hay marcha atrás, ser tú mismo es lo único válido.

La lógica, te dice a veces, que deberías intentar aflojar un poco y ceñirte a las normas, que uno no debe salirse de forma tan drástica de lo conveniente, pero tu «yo», contradice todo esto y te empuja a ser como eres, con tus defectos, tus virtudes, tus antojos y tu forma de funcionar. No puede ser de otra forma aunque sea un poco inconveniente.

Todo esto nos lleva irremediablemente, a buscar la compañía de aquellas personas a las que no les importa como eres, con las que puedes mostrarte con libertad absoluta sin miedo a que se aparten de ti, aquellos maravillosos seres que han llegado a la misma conclusión que tú y que se comportan contigo mostrando su esencia, sin que ello malogre las buenas relaciones.

¡Qué importante poder alcanzar ese momento! ¡Qué gratificante poder tener a tu lado a personas que como tú, han decidido prescindir de todo aquello que las hace infelices y que luchan por conservar a su lado sólo a aquella gente que hace que tu «yo» sea el único apropiado.

La edad, no cabe duda, juega a nuestro favor cuando se trata de mostrar nuestra propia esencia, hace que nos comportemos como somos y que de forma delicada, siempre de forma delicada no se os olvide, podamos decirle al mundo que con todas nuestras cosillas, somos seres únicos y se nos debe respetar por ello.

Me gusta esta parte de cumplir años, espero que todos podamos crecer siendo cada año un poquito más únicos, y molestando lo menos posible al prójimo, poder hacer lo que creemos que es mejor para nosotros, rodeándonos de aquellas personas que nos dejan vivir con nuestra esencia y en total libertad. Eso, creo, no es ser egoístas sino intentar alcanzar la absoluta felicidad.

Hasta mañana. Vivid y divertíos siendo siempre vosotros mismos.