La nieve y una taza de café….

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Hoy me he levantado con una de las más increíbles imágenes que se pueden contemplar…, el patio de mi casa cubierto totalmente de nieve. La sonrisa acudió de inmediato a mi rostro y también me hizo desear una taza de café. ¿Os gusta el café? Ese maravilloso líquido negro que está lleno de ideas, de energía, con un exquisito aroma y un sabor delicioso, que ayuda a que a la hora del desayuno  sea mucho más importante su aroma  que las catástrofes que se leen en el periódico….y que transforma un «déjame en paz» en un dulce «Hola buenos días». Yo lo necesito, pues mi día no comienza hasta después del café.

Cuando ya tenía el café caliente y el espectáculo, me senté en mi sillón, con las piernas encogidas y la taza caliente entre mis manos y fue, creedme, uno de los momentos más felices y únicos del día. Era muy temprano y todavía no había mucha luz y eso hizo que ese rato fuera mágico.

Por un momento se unieron dos de las cosas que más me gustan y cuando volví del «cielo»,  me dí cuenta, de que me iba a ser muy dificil llegar a mi trabajo,  pues las carreteras por las que yo tengo que ir no son precisamente autopistas y esa quizás es la incomodidad de tanta nieve y lo que hace que  mucha gente la odie y piensen que además es sucia, molesta, y hace que tu vida no pueda transcurrir con normalidad. No sé para vosotros pero para mí ese es su encanto, salirse de lo habitual y ser realmente bella.

Os habéis parado a pensar, que un sólo  copo de nieve es una de las cosas más frágiles de la naturaleza, pero que unido a otros se convierten en algo grandioso. Una nueva lección de vida que nos da la naturaleza. ¿Y esquiar? ¿Habéis probado? Es una de las mejores sensaciones de las que se puede disfrutar, te sientes libre, ágil, ligero, muy pequeño ante esa inmensa superficie de nieve, pero muy feliz por poderla disfrutar.

Al final, no pude ir a trabajar, pero el día ha sido tranquilo, casero, he podido estar con mis perros y por lo poco habitual que son mis días de diario en casa, pues fantástico. Y eso, también se lo tengo que agradecer a la nieve. Como veis todo son ventajas.

Hasta mañana que ya es San Viernes, preámbulo del finde…..¡Qué bien! Vivid y divertíos.

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