
Hace tiempo leí una historia de esas que te mandan de vez en cuando por esta vía virtual con la que la mayoría jugamos y escribí y colgué en mi tablón esta frase. De vez en cuando la leo y me provoca una sonrisa, pero hoy que me he vuelto a encontrar la historia y la he releído, he pensado en lo adecuada que puede ser para hacer que todas tus personas queridas y la gente que te rodea se sientan bien. Además dicen que hacer que la gente se encuentre bien aunque sólo sea un segundo conlleva que tú también te sientas cómodo después de ese segundo, por lo que creo que es ventajoso hacer la prueba y comenzar el día con un ratillo grato.
La historia, que no viene al caso pero seguro que muchos habéis leído, se puede reducir en esta frase «¿Qué puedo hacer para mejorar tu día?». Buena, ¿verdad? Es simple, sencilla, fácil y suple todas las fórmulas diarias de amables deseos, los «buenos días», «te deseo lo mejor», «qué tengas un buen día» se pueden condensar en ella. Seguro que al principio bloquearás al personal, cosa normal por la falta de costumbre, pero pronto conseguirás que entiendan el alcance de lo que dices y te recompensarán, aunque no sea lo que busques, con una gran sonrisa de satisfacción. Sólo hay que decirla y repetirla hasta que la comprendan y por supuesto estar dispuesto a intentar hacer lo que te pidan, si no es muy complicado claro.
Para probar vamos a jugar a empatizar (palabro, lo sé, pero muy claro). Imagínate que cuando vas a desayunar un día cualquiera alguien te saluda con «¿Qué puedo hacer para mejorar tu día?». En un principio la sorpresa, la incredulidad, esa sensación de «pero éste que dice, seguro qué me está tomando el pelo» te ganan, pero si esa persona viendo tu cara, vuelve a insistir y repite «¿Qué puedo hacer para mejorar tu día?» la cosa se empieza a poner interesante, una voz interior te susurra: «uhmmm… ¿ésto de que va?» y tu actitud comienza a cambiar y piensas «bueno…., no está mal este saludo». Si ésto te ocurre todos los días, se inicia en tu cabeza un pensamiento fijo sobre lo agradable que sería saludar con ésta fórmula y hacer algo para mejorar el día de alguien y poco a poco, por contagio, otros pensarás igual que tú y probarán y entonces tu mundo será mucho más amable y divertido…… ¡Jajaja, soñar es gratuito!.
Un poco utópico y melindre, lo sé, pero le voy a quitar la parte empalagosa y voy a probar instalando esta frase en mi disco duro y utilizándola de saludo para ver que ocurre. En una temporada os contaré los resultados sean del tipo que sean pues me encanta probar cosas nuevas que vitalizan mi vida y con este asunto que me parece ingenuo y divertido, no tengo nada que perder, así que veremos que sucede…
Si alguien prueba, no me creo que no haya nadie que como yo sienta curiosidad, sería genial que nos contase como le fue. Hagáis lo que hagáis, no dejéis nunca de vivir y divertiros pues es lo único que merece la pena. ¡Hasta otro día!